Maqui llegó al Refugio el año 2013 de una manera muy misteriosa. Se avisó sobre la presencia de un pequeño puma en el sector del Toyo, que se encontraba solo y con hambre luego de haber perdido a su madre en las montañas. Se organizó al instante una búsqueda que duró 3 días y en la mañana del tercer día habían pocas esperanzas de encontrarlo, pero increíblemente el pequeño puma llegó solo al centro.
Los hechos asombraron a todos, Maqui caminó mas de 10 Km, pasando por pueblos y cruzando puentes para llegar al único lugar donde encontraría ayuda. Llegó muy debilitado, con extrema delgadez y asustado. Maqui fue criado en el Refugio y hoy vive junto a Huilo en un recinto natural…
Es un puma muy curioso, le encanta correr, disfrutar de su entorno y de los juegos con sus cuidadores. Asegurar el bienestar de un puma no es fácil, ¡pero en el Refugio le damos la mejor vida posible!